No, no todas las materias pueden ser objeto de mediación.

Especialmente en los procedimientos de familia cuando exista violencia, abusos o patologías graves (alcoholismo, drogadicción...).

En el proceso de mediación todas las partes están al mismo nivel es por ello que debe primar:

  1. Voluntariedad.
  2. Confidencialidad.
  3. Neutralidad.
  4. Imparcialidad.
  5. Interés superior del menor y dependiente.
  6. Proyección hacia el futuro.
  7. Flexibilidad.
  8. Buena fe.
  9. Ética y competencia profesional.

  • Es un método rápido.
  • Reduce el coste emocional.
  • El coste económico es inferior al de un juicio.
  • Los acuerdos se establecen en base a las posibilidades de las partes.
  • Satisface los intereses de las partes.
  • Tiene un claro enfoque multidisciplinar.
  • Se puede revidar y/o modificar.
  • Tiene caracter vinculante.
  • Se puede elevar a escritura pública.

Mediación Civil y Familiar

Como mediadora, mi perspectiva es facilitar un diálogo constructivo entre las partes involucradas, promoviendo soluciones consensuadas y evitando largos y costosos litigios, a través de un servicio personalizado para todos.
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